¡Feliz domingo, bellas! Ya teníamos ganas de contaros qué es el melting. Es la técnica de color adecuada para quienes no desean continuar con Balayages, pero sí quieren ver un cambio de color. ¿Qué tiene de especial?

'Melting' es una palabra que le hemos 'robado' al inglés americano y a las personas de habla latina que tanto mezclan sus palabras con el inglés: TO MELT significa 'derretirse'. Ellos lo utilizan cuando hablan de helados derretirse o nieve fundiéndose, ¡ahora eso ha llegado al pelo! Imagínate que echas un cubo con pintura líquida sobre una superficie redonda y cae de forma muy uniforme, resaltando ciertas partes tridimensionalmente (más luminosas) mientras se mezcla con todo el cabello y va quedándose cada vez más integrado... ¿Te haces a la idea?

Como la naturalidad es lo que más gusta en todo el mundo, el melting no es otra cosa que una transición, una (muy, muy) sutil unión entre la base natural y la parte inferior más clara. Sobre una base más oscura, poco a poco (pero muy poco a poco), se va aclarando hacia la zona de las puntas. 

La diferencia con las Balayages es que estas están mucho más marcadas que estas últimas y además, el 'Melting' acepta muchos tipos más de tono, porque la mezcla es casi imperceptible. Si quieres que se perciba el degradado perfecto entre castaño y rubio claro, el melting se realizaría como en un tono miel intermedio, transición en tonos caramelo hasta llegar al más claro. Nosotras lo vemos como una evolución inspirada en nuestras queridas 'Balayages'. 

Las Tiger Eye son mechas más claras que el tono de base y muy finitas para iluminar melenas morenas, el resultado es sutil pero mucho más marcado que en el caso de los reflejos Melting o Mechas Melting.